Sistema educativo: equivocado

Espacios abiertos para el diálogo permanente y NO paredes  que te van apretando con el paso de los días. Mirarse y mirarnos las caras para disfrutar de nuestras expresiones y emociones en el proceso de aprender y NO pupitres anclados a tierra como si fueran barcos a la deriva. Alumnos/as despiertos, preguntando, exprimiendo, dirigiendo, hablando, cooperando..y NO elementos pasivos pegados a esas sillas a los pupitres ancladas. Educadores activos, que sonrían, que discutan y dejen discutir, que permitan volar por el aula libremente la ocurrencia, la casualidad, la imaginación, para corregir, ayudar y enseñar lo correcto; librepensadores construyendo librepensadores y NO instrumentos pasivos, papagayos de la educación y del libro de texto, seguidores incondicionales del sistema educativo que no educa, desgastadores de la palabra autoridad que no les autoriza el respeto, la complicidad ni el aprecio.

La correcta educación ya estaba inventada, aquella en la que el educador no se cree en posesión de la única verdad, porque hasta la verdad es discutible, la educación del diálogo, de las preguntas absurdas, de respuestas y más preguntas, la que regala conocimientos a través del impulso del autoaprendizaje, la investigación y la coherencia. La educación NO va de tecnología, ni de digitalizarlo todo, ni de grandes recursos y grandes cambios....va de lo que ya estaba inventado y funciona. El educador tiene que educar y no esconderse entre ordenadores, ni dejar su trabajo en manos de un libro digital ¿atractivo?...deshumanizado, sustituto aburrido de nuestras habilidades y nuestro encanto.Y a esto quiero sumar lo objetivo, lo que todos entendemos: no hay dinero para mejorar los espacios donde educamos, no hay dinero para comedores y comida, no hay dinero para aprendizajes complementarios y extraescolares, no hay dinero para proyectos reales que ayuden a alumnos reales, no hay dinero para transporte escolar, material y educadores...pero hay dinero para crear recursos que yo no considero ahora mismo prioritarios. Es una gran mentira, la revolución del proceso enseñanza- aprendizaje está en nuestro potencial humano, siempre ha estado ahí, lo demás son adornos que yo no quiero comprar....entre otros motivos porque no hay dinero.